Tabla de contenidos:
Italia- Conflicto: Segunda Guerra Mundial
- Institución: No instituida oficialmente
- Antigüedad: 1946 – 78 años
- Diseño: Francesco Nagni, escultor
- Fabricante: Stefano Johnson, Milán
- Forma: Circular
- Anverso: En el centro la Victoria alada desenfundando una espada, entre una gran V de victoria y un sol a la izquierda. Alrededor la inscripción en inglés FREEDOM FOR THE WHOLE WORLD (Libertad para el mundo entero). Bajo el pie izquierdo, en pequeño F. NAGNI.
- Reverso: En el centro, en vertical, una rama de olivo, rodeada de la frase en inglés THE WORLD WAR 1939 – 1945 (La guerra mundial 1939-1945). Bajo la rama, las iniciales del fabricante SJ.
- Cinta:
- Peso: 16 g
- Tamaño: 32 x 37,4 mm diámetro
- Grosor: 3,4 mm
- Material: Bronce
- Ref.: 23-EB068-34
Una medalla que no pasó de proyecto
En la creencia de que sucedería lo mismo que al finalizar la I Guerra Mundial, que muchos países aliados emitirían una medalla de la victoria partiendo de una descripción común y con la misma cinta para todos, acabada la II Guerra Mundial, el fabricante Johnson se adelantó al encargo y realizó una medalla equivalente, siguiendo los mismos principios que en la guerra anterior.
Encargó al escultor Francesco Nagni un boceto y posterior grabado, acuñando un número limitado de ejemplares. Finalmente los aliados no hicieron nada al respecto y Johnson puso recientemente a la venta los ejemplares existentes, sobre 2009.
Francesco Nagni
Nació en Viterbo el 7 de febrero de 1897, hijo de Eugenio y Flaminia Paglialunga.
Después de dejar los estudios técnicos, se matriculó en Roma, en la Academia de Bellas Artes, donde tuvo como maestro a Ettore Ferrari. Posteriormente trabajó en los estudios del propio Ferrari, Giuseppe Guastalla y luego Attilio Selva, permaneciendo siempre en Roma.
Muchas experiencias ayudaron a consolidar las cualidades plásticas autóctonas. De éstos y de aquellos Nagni extrajo vigor y prestigio. Su estilo tiene improntas italianas y exclusivamente italianas: sus estimulantes simpatías van desde la escultura del siglo XIV hasta la escultura del siglo XVII.
Aporta el mismo amor tanto a la composición como al modelado, reconciliando el arte y la vida con delicadeza humanista. Su primera obra de gran formato es el “Monumento a los Caídos, en Fano (1924). Mientras diseñaba dos bustos para la Sala dei Condottieri del Vittoriano de Roma, obtuvo en 1934 el encargo del “Monumento al Mariscal Díaz” en Nápoles. Digno de mención son sus «Ángeles», «Retrato de la Madre», el muy dulce altorrelieve «Dormitio Virginis», (1939), la majestuosa estatua de San Pablo para la nueva iglesia de los Santos Pedro y Pablo en Roma.
Sus obras se pueden ver en Viterbo, Amatrice, Foggia, Segezia, Bari. En 1940 realizó un alto relieve en travertino para: la estación Ostiense de Roma. Actualmente ha terminado “Madonna con el Niño” y “San Tarcisio” en mármol para una iglesia en Quebec (Canadá). Es el responsable del gran altorrelieve «La Virgen Propiciadora de las Gracias», para la iglesia de los Frailes Menores de Roma.
También se dedicó a las medallas y fue a él, al final de la Segunda Guerra Mundial, a quien la empresa Stefano Johnson de Milán confió el boceto de las medallas de la victoria interaliadas que debían entregarse a todos los soldados cobeligerantes (por razones económicas, la empresa dispersó las antiguas existencias en el mercado numismático).
En la posguerra, los encargos del régimen fascista fueron sustituidos por los múltiples encargos del Vaticano. Participó en el concurso internacional para las puertas de San Pedro convocado en 1947 por el Papa Pío XII para sustituir las antiguas puertas de nogal por otras de bronce; tras la muerte de Alfredo Biagini, su proyecto (que no llegó a realizarse), presentado en colaboración con Alessandro Monteleone, figuró entre los ganadores en 1952 junto con los de Giacomo Manzù y Venanzo Crocetti. La instalación del monumento a Pío XI Ratti en la basílica de San Pedro de Roma data de 1949 (el molde de escayola se conserva en la residencia papal de Castelgandolfo); Nagni también es responsable de la urna de bronce dorado de la misma basílica, donde se conserva el cuerpo de San Pío X Sarto desde 1952, año siguiente a su beatificación.
Dos encargos para Viterbo se remontan a la primera mitad de los años 1960: el Monumento al III Regimiento de Granaderos (1962, bronce, Piazza della Rocca) y L’Assunta (1964, bronce, Piazza dei Caduti o del Sacrario; reproducido en B. Tecchi – G. Fallani – A. Selva et. al , 1965, p.62), caracterizado por una mayor estilización de las formas. Al mismo tiempo, el arquitecto Adriano Marabini finalizó la construcción del monasterio-santuario de Santa Gemma Galgani en Lucca y encargó a Nagni que modelara la urna colocada bajo el altar mayor y destinada a albergar el cuerpo de la santa (1965). Particularmente exigente fue el encargo de unas obras de bronce destinadas a la catedral de San Paolo en Brasil, a la que se dedicó en varias ocasiones y durante varios años.
Fue profesor en la Academia de Bellas Artes de Roma, académico de S. Luca, de los Virtuosos del Panteón y, en Bolonia, de la Accademia Clementina.
Murió en Roma el 11 de julio de 1977.
Stephano Johnson
Los orígenes de la empresa se remontan a la tercera década del siglo XIX, cuando el inglés Giacomo Johnson instaló un laboratorio en la actual zona de Corso Venezia donde se fabricaban botones y escudos en metal prensado. Tras la muerte del fundador, el negocio fue continuado por su hijo Stefano, quien dio un mayor impulso a la producción de medallas y al mismo tiempo cambió el nombre de la empresa a «Stefano Johnson – Medal Factory».
En 1860, después del traslado de la planta a Stradone di S. Angelo, la sede se trasladó a Corso di Porta Nuova nº 15. En los años siguientes, la producción de medallas siguió gozando del favor de un público compuesto por asociaciones, organismos públicos y privados, órdenes religiosas y representantes de las familias nobles ambrosianas. En 1880, tras la muerte de Stefano, su hijo Federico, que se había incorporado a la empresa cuatro años antes, tomó las riendas de la empresa, implementando una política de consolidación y transformación que supondría un punto de inflexión en todo el complejo empresarial. En particular, procedió a la compra de los moldes de la Casa de la Moneda de Milán (que cesó en 1878) e inició un largo proceso de modernización de la maquinaria que finalizaría en 1911 con la inauguración de una nueva fábrica. En esa fecha, la producción se había ido orientando también hacia medallas que conmemoraban hazañas de armas y a hombres ilustres implicados en el desarrollo industrial y la gestión pública, combinada con la inauguración de una fundición artística para obras de gran envergadura y la de una gran sala destinada a museo en la sede de la fábrica. Con el estallido de la Primera Guerra Mundial y tras numerosos pedidos estatales, la producción se concentró aún más en eventos militares y luego se vio obligada a satisfacer el gusto predominante durante el período fascista. En agosto de 1943, el centro social sufrió importantes daños provocados por un bombardeo, que obligó a Stefano Johnson, hijo de Federico, a interrumpir casi por completo la actividad durante tres años.
En los años siguientes, Cesare, el hijo de Stefano, reinició la empresa; en 1949 se estableció la sede en Piazza S. Angelo nº 1, en 1958 se inauguró la nueva planta en Baranzate di Bollate, en las afueras de Milán. En las décadas siguientes, la actividad de la empresa continuó respetando una tradición que siempre la ha visto competir con los mejores artistas del sector y esto en paralelo con la búsqueda constante de las soluciones técnicas más avanzadas.